Cyberflashing: en California podrás demandar a quien envíe fotos o videos obscenos no solicitados
SACRAMENTO, California.- El Senado estatal aprobó por unanimidad un proyecto de ley que permitirá a quienes reciban fotos o videos obscenos en sus dispositivos, conocido como cyberflashing, demandar a los remitentes.
El proyecto de ley 53 del Senado contra este tipo de ataques de acoso y abuso sexual digital, ahora está en manos del gobernador, Gavin Newsom, para su firma.
De acuerdo con el proyecto de ley, las personas que reciban material lascivo no solicitado en sus dispositivos móviles podrán llevar a cabo demandas para exigir reparaciones civiles valoradas entre $1,500 y $30,000 por daños económicos y no económicos.
El supuesto de la ley sanciona a las personas mayores de 18 años que, sin una solicitud expresa de la otra parte, envíen imágenes o videos sexualmente explícitos a sus dispositivos electrónicos.
Esta práctica es conocida como cyberflashing y, de acuerdo con la senadora Leyva, ataca principalmente a mujeres jóvenes que no tenían un mecanismo para reclamar un derecho privado a la acción en estos casos.
“California puede evitar que los usuarios de tecnología experimenten formas digitales de abuso sexual y acoso; y puede ayudar a fomentar una comunidad digital segura y saludable”, destacó la senadora Connie Leyva, demócrata por Chino.
Mujeres jóvenes, son blanco de cyberflashing
El envío de imágenes o videos sexuales no solicitados es una práctica común que tiene a las mujeres jóvenes como sus víctimas principales.
Según una encuesta realizada por la aplicación de citas a través de redes sociales, Bumble, el 46% de las personas encuestadas han sido víctimas de cyberflashing en los Estados Unidos.
De este porcentaje, el 54% aseguró que no había solicitado las imágenes o videos y que no se sintieron bien de haberla recibido.
El envío de este tipo de imágenes sexuales no solicitadas ocurre con frecuencia: uno de cada dos la han recibido en el último año, mientras que uno de cada tres en el último mes.
Bumble es uno de los patrocinadores de la ley que fue aprobada con apoyo bipartidista y que ahora está pendiente de su firma por parte del gobernador.