“Si no recibimos financiación en las próximas semanas, SEPTA se va a ver obligada a recortar el servicio de transporte público en el sureste de Pensilvania”, asegura la portavoz Elvira Méndez. Y es que si la Autoridad de Transporte del Sureste de Pensilvania (SEPTA) no recibe financiación de $168 millones antes del 24 de agosto, quedarían eliminadas 32 rutas de autobuses y se reducirían otras, que afectarían directamente a estudiantes que comienzan clases a finales del este mes.