Organizaciones reclaman que México quiere "violar los derechos de los migrantes" sin testigos y por eso les niega acceso a estaciones migratorias

TIJUANA, México.- Activistas promigrantes de Tijuana condenaron al Instituto Nacional de Migración (INM), que les negó desde el martes la entrada a las Estaciones Migratorias y Estancias Provisionales de Migración en todo el país, donde desde hace meses se encuentran cientos de migrantes que fueron detenidos tras su intento de cruzar territorio mexicano para llegar a Estados Unidos y solicitar asilo.
Soraya Vázquez, coordinadora de la organización Families Belong Together en Tijuana, dijo a Univision Noticias que se trata de una medida "totalmente carcelaria" que no les sorprende: “Están mostrando una política muy esquizofrénica que está sustentada en una serie de ocurrencias que impiden el trabajo de los defensores de derechos humanos y genera una situación muy delicada porque las personas que están en las estaciones migratorias están privadas de su libertad, sin acceso a un abogado y a una defensa, además de que están siendo deportadas sin tener una asesoría jurídica y ninguna garantía de derechos de acceso al asilo”, dijo.
Para Paulina Olvera Cáñez, directora de Espacio Migrante, la situación es vista como “una violación a los derechos humanos y la transparencia" que se suma a más fallas del sistema que complican el respeto de los derechos de los migrantes: "De por sí ya hay tantas preocupaciones sobre el hacinamiento en el que viven los migrantes en estos centros, la falta de información que les brindan sobre sus derechos, la falta de atención médica. Ahora sin la observación de estas organizaciones va a ser muy difícil y complicado todo para ellos”.
Tras el reclamo, este miércoles el INM reinstauró las visitas de 10 organizaciones no gubernamentales y religiosas a las estaciones migratorias a partir del primero de febrero. Lo hizo al asegurar que "refrenda su compromiso con una política migratoria sustentada en el respeto pleno a los derechos humanos y transparencia", se lee en el comunicado.
El lunes, el INM informó en un comunicado que entre el 18 y el 27 de enero, el gobierno mexicano deportó al menos 2,303 hondureños, de los más de tres mil detenidos durante su intento de entrada a México en caravanas que han sido disuadidas por agentes de migración y la Guardia Nacional (GN). Los retornos se han realizado en 10 vuelos y 34 autobuses que han salido custodiados por agentes del INM y la GN. Los activistas consideran que antes de la repatriación, a los migrantes no se les respetan sus derechos ni se valoran sus casos para una posible solicitud de asilo en el país.
“No hay justificación”
El INM pidió el lunes suspender temporalmente el ingreso a integrantes de asociaciones civiles y religiosas debido a que la actual contingencia migratoria que se presenta, derivada de las caravanas migrantes que han llegado a la frontera sur de México en los recientes días, ha propiciado “el incremento considerable de solicitudes de ingreso a las estancias y estaciones migratorias". La Secretaría de Gobernación se desligó de ese oficio menos de tres horas después de hecho el anuncio, pero el martes el INM confirmó la noticia y se desató una nueva crisis al exterior.
El argumento con el que el INM justificó la medida es para “no obstaculizar la operatividad de las instalaciones, poder brindar atención prioritaria a los migrantes y se cumpla con el servicio público encomendado a esta autoridad administrativa”.
Pero los activistas no se callaron. Paulina Olvera Cáñez considera que, pese a que se diga que se trata de desahogar los servicios para los migrantes, “no hay justificación” para que tome esa decisión debido a que solamente a través del monitoreo de las organizaciones civiles es que se conocen las condiciones de los migrantes al interior de estos centros.
Soraya Vázquez coincidió en ello al señalar que “impiden el ingreso de defensores de derechos humanos para que las autoridades puedan, con toda libertad, violar derechos humanos sin ser cuestionados ni observados. Los funcionarios (...) tienen una visión criminalizante sobre la migración”.
Univision Noticias y el medio mexicano Animal Político han reportado que diversas organizaciones en la frontera sur de México llevan dos semanas encontrándose con las puertas de las estaciones migratorias cerradas en lugares como Villahermosa y Tenosique, Tabasco; Tuxtla Gutiérrez, Comitán y Palenque, Chiapas; y la Ciudad de México.
Además, que a asociaciones como Asylum Access, Voces Mesoamericanas, Formación y Capacitación o Colectivo Kaltsilaltik y el Centro de Derechos Humanos Fray Matías, se les han negado los permisos para ingresar a la estación Siglo XXI.
Debido a esta situación, las organizaciones civiles y religiosas en Tijuana ya se han puesto en contacto con sus similares del sur y con organismos internacionales de defensa de los migrantes y los derechos humanos, para programar algunas medidas en contra de esta prohibición.