Un grupo de soldados estadounidenses de la Organización del Atlántico Norte (OTAN) irrumpieron por error en una planta de fabricación de maquinarias durante una maniobra de guerra en la región búlgara de Plodiv. Los militares simulaban la toma y aseguramiento de un aeródromo local y creyeron que la instalación formaba parte del aeropuerto, pero en realidad estaba ocupada por civiles búlgaros que operaban un negocio privado. El dueño de la factoría presentó una demanda a la OTAN por el incidente. La embajada de EEUU en Sofía, capital búlgara, se disculpó por lo ocurrido en la planta.