El sobrepeso se ha convertido en una condena para Juan Pedro Franco, cuyo contacto con el exterior es a través de las redes sociales. Ni él ni su familia se explican cómo ha llegado a pesar 880 libras, pues su dieta es la de una persona normal. Ellos no han conseguido la solución que necesitan en México y siguen a la espera de que alguien los ayude.