7 personas que no hicieron bien su trabajo en 2015 y pasaron a ser juzgadas por Internet... y a la infamia

¿Qué tan malos tenemos que ser para ganar notoriedad internacional y que nuestros actos sean despreciados por TODO INTERNET? Las personas de esta lista no son grandes ejemplos de desmedida crueldad, solo sorprendieron (¿horrorizaron?) al mundo y sus historias se volvieron virales. Internet los juzgó y el veredicto fue claro: "¡córtenles la cabeza!". Muchos perdieron su trabajo (algo que ya de entrada parece que no hacían muy bien). Veamos quiénes son y cuáles fueron sus crímenes. En 2015, Internet separó la paja del trigo, los justos de los tramposos.

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1. Rachel Dolezal o "ser negra sin ser negra"

Rachel Dolezal mintió sobre ser negra. Usa una peluca, se broncea para oscurecer su piel, dice que "espiritual y filosóficamente" es negra pero sus padres le contaron al mundo la verdad. ¡Sus propios padres! "No, hija, no eres negra". "Pero, ¡mamá!". Trabajaba para una organización que defiende los derechos de los estadounidenses afrodescendientes. Hasta que la echaron porque mintió y le costó mucho, mucho reconocer que "no soy negra". Algunos la defendieron. ¡Que sea lo que quiera ser!

2. Kim Davis, infame desobediencia

Kim Davis era una funcionaria del juzgado en Kentucky y una vez que en Estados Unidos se aprobara el matrimonio homosexual, ella decidió que casar a personas del mismo sexo era inmoral, en contra de sus principios, así que se negó a hacer su trabajo. ¡NO LO HARÉ! ¡YO NO LOS CASO! Su estoico cristianismo hizo que la procesaran por desobedecer un pedido de la Suprema Corte de Justicia (es decir, haz tu trabajo Kim, casa a estos muchachos). Una aguafiestas, Kim, era solo poner un sello en una libreta de matrimonio.

3. Martin Shkreli, multimillonario malvado

Martin Shkreli fundó la farmacéutica Turing, adquirió patentes de un medicamento llamado Daraprim (una droga que está en la lista de medicamentos esenciales de la Organización Mundial de la Salud) y subió el precio de US$13.50 a US$750 por tableta, es decir, más de 5000%. PARA GANAR DINERO. Además, Martin se jactaba de ser un soltero muy cotizado (se lo ha visto en Tinder), jugaba League of Legends y hacía streaming en Youtube. Precisamente estaba grabando un video cuando recibió una llamada del FBI porque... "Martin, además de ser un ser humano deplorable, nos dimos cuenta que robaste dinero". Lo arrestaron y renunció a su empresa. Internet festejó.

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4. Petra László, la periodista húngara que pateó refugiados sirios en cámara

Esta mujer sostenía una cámara de un canal de televisión húngaro para el que trabajaba cuando se la vio pateando a un refugiado con un niño en brazos. Si bien luego se disculpó diciendo que había entrado en pánico, fue despedida y recibió varias amenazas de muerte. Está pensando en mudarse a Rusia (¿Siberia?). Una clase de notoriedad que NADIE quiere tener. 

5. Melissa Click, la profesora de comunicación que odia a los periodistas estudiantiles

Durante una protesta en el campus universitario donde trabajaba como docente, Melissa Click pidió "refuerzos" para sacar de ahí a un estudiante de periodismo que estaba filmando las demostraciones. Sorprendente, ya que ella es profesora de comunicación y además... su modales fueron un poco abruptos. Al poco tiempo, renunció.

6. Sir Tim Hunt, ganó el Nobel, cree que las mujeres son "un problema" en la ciencia

A pesar de haber ganado el premio Nobel en Medicina en 2001, Sir Tim Hunt hizo algunos comentarios que resultaron bastante desagradables, en particular que "las mujeres que trabajan en laboratorios son inconvenientes porque se enamoran de ti, te enamoras de ellas y lloran todo el tiempo". Chicas, ¿ven el claro atractivo del señor Hunt, no? Muchas mujeres que se desempeñan en áreas científicas sintieron que se les tomaba el pelo -miren su nariz- (es un campo dominado por hombres donde a veces les cuesta ser tomadas en serio) y publicaron fotos con el hashtag #distranctinglysexy. Hunt tuvo que renunciar a un puesto honorario de docencia. 

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7. Walter Palmer, el dentista que mató a Cecil, el león

El último infame de la lista es el dentista cazador que mató a Cecil, un león de una reserva en Zimbabwe. Walter Palmer supuestamente pagó 50.000 dólares a un guía local para que lo asesorara sobre cómo terminar la vida de Cecil. Si bien no fue procesado por las autoridades de Zimbabwe, Internet se dedicó a saturar su práctica dental de críticas negativas y llenar su domicilio y lugar de trabajo de señales de protesta. 

¡No molestes a Internet porque Internet recuerda (al menos por unos meses pero lo suficiente para arruinarte) y no perdona!

¿Recordabas estas noticias del 2015 donde alguien pasó a recibir mucha atención por sus actos cuestionables... y mucho odio?