Miles de manifestantes, en su mayoría estudiantes, marcharon hasta la plaza de Tiananmen tras la muerte de Hu Yaobang, un exlíder del Partido Comunista que había trabajado para introducir reformas democráticas en China. Esta fotografía muestra el gigantesco campamento de estudiantes en la histórica plaza central de Beijing el 1 de junio de 1989. Crédito: Peter Charlesworth/LightRocket via Getty Images
En duelo por Hu, los estudiantes pedían al gobierno más democracia, libertad de expresión y prensa libre. Miles de personas se unieron a los estudiantes en la plaza Tiananmen y el número de manifestantes se multiplicó. Esta captura de una imagen de la televisora estatal china muestra el arresto de uno de los activistas, el 1 de junio. Crédito: Peter Charlesworth/LightRocket via Getty Images
El gobierno chino había hecho una serie de reformas en los años previos que establecieron una forma limitada de capitalismo. Sin embargo, muchos chinos aún padecían la falta de democracia establecida por el partido único y una economía que no resolvía el desempleo y la pobreza.
En la fotografía un grupo de estudiantes en Beijing quemando copias de un diario oficialista que criticaba las manifestaciones. 2 de junio de 1989 Crédito: Jeff Widener/ASSOCIATED PRESS
En la fotografía un grupo de estudiantes en Beijing quemando copias de un diario oficialista que criticaba las manifestaciones. 2 de junio de 1989 Crédito: Jeff Widener/ASSOCIATED PRESS
Una joven atrapada entre civiles y soldados que intentaban sacarla de una protesta frente al Gran Palacio del Pueblo, el 3 de junio. Los estudiantes también argumentaban que el sistema educativo de su país no los preparó adecuadamente para un sistema económico con elementos del libre mercado. Crédito: Jeff Widener/AP
La presencia de los militares no logró sofocar las protestas y las autoridades decidieron reprimirlas violentamente. En la madrugada del 4 de junio cientos de soldados y policías chinos asaltaron la plaza y dispararon balas reales contra la multitud. Crédito: Langevin Jacques/Getty Images
Un manifestante herido cuando era rescatado por sus compañeros. El gobierno Chino
aún intenta justificar la violencia desmedida, sin embargo líderes de todo el mundo condenaron la masacre. Crédito: Langevin Jacques/Getty Images