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En fotos: un acercamiento extremo al edificio que colapsó en Surfside

Libros, cuadros, peluches, camas, cobijas, computadoras, sillas, maletas, ropa y otros objetos personales entre los escombros, parte de una cotidianidad que nos recuerda que las víctimas no son solo números. El inesperado derrumbe de un edificio frente al mar en Surfside, Florida, interrumpió súbitamente la vida de decenas de personas y dejó a la vista parte de su entorno antes de la tragedia. Siga aquí nuestra cobertura en vivo de este incidente
28 Jun 2021 – 05:24 PM EDT
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Al fondo de la habitación un póster gigante del puente de Brooklyn y la ciudad de Nueva York, del otro lado la inmensidad del Océano Atlántico. Este acercamiento extremo a las ruinas del edificio Champlain Towers South describe la vida de sus residentes, la mayoría aún desaparecidos después de que la estructura se derrumbara en la madrugada del 24 de junio.

Vea aquí las fotografías interactivas del antes y después del derrumbe del edificio Champlain Towers South, al sur de Florida
Crédito: David Maris
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Esta litera junto a una silla de oficina está en las ruinas del apartamento donde vivía Linda March, una de las personas que aún se encuentra desaparecida. Según la agencia AP, March tenía alquilado el penthouse cuatro del piso 12 del edificio, y utilizaba este dormitorio amoblado con una litera como oficina.

March tenía 58 años, era abogada, no tenía hijos y estaba divorciada. Según Rochelle Laufer, una amiga que fue entrevistada por la agencia AP, su vida frente al mar en Surfside significó un nuevo comienzo. Vivía en un pequeño apartamento de Nueva York y sobrevivió al covid-19 antes de mudarse a Florida.

Aunque disfrutaba la vida frente al Atlántico no estaba a gusto con el ruido de las construcciones cercanas, contó Laufer. Estaba buscando un lugar para mudarse.
Crédito: David Maris
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Una cama parcialmente expuesta al vacío en el borde de lo que quedó del piso siete del edificio.

Silencio absoluto. Luego del ruido estruendoso del derrumbe, ocurrido en dos etapas de unos ocho segundos de separación cerca de las 2:00 AM, es muy poco lo que interrumpe el silencio casi total en el área.

El espacio aéreo sobre la zona está suspendido y no hay ruido de sirenas de emergencia. El silencio es imprescindible para los expertos bajo la montaña de escombros, aún con la esperanza que un golpe o grito los lleve a algún sobreviviente.
Crédito: David Maris
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Una cabecera de cama y dos mesas de noche a cada lado en el angosto borde que dejó el derrumbe en este apartamento del piso 10. No está el colchón sobre el que probablemente alguien dormía cuando sucedió la tragedia.

La ciudad de Surfside, al norte de Miami Beach, está vacía. Algunos periodistas caminan en las calles cercanas, una zona completamente cerrada por las autoridades y prácticamente en absoluto silencio. Extrañamente no hay demasiado tráfico.
Crédito: David Maris
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Un espacio de oficina en el piso 11 del edificio. Todavía sobre el escritorio una computadora abierta, un saco colgado en la silla de trabajo y en el suelo dos cuadros con imágenes de instrumentos musicales.

Desde la distancia esta tragedia parece absurda, especialmente cuando vemos alrededor a decenas de edificios muy parecidos en altura y edad intactos frente al mar.
Crédito: David Maris
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Dos maletas entre los escombros en los restos del piso seis. Algunas de las víctimas recién habían llegado a instalarse en el edificio, otros planeaban salir de viaje al día siguiente.

Para poder ver el ala colapsada del edificio, la que daba al océano, hay que caminar varios minutos por la playa.

Al día siguiente de la tragedia, cuando fueron tomadas estas fotos, un pequeño grupo de bañistas parecía intentar ignorar lo sucedido para disfrutar el día de playa, mientras algunos curiosos se acercaban al cerco policial a la orilla del agua.
Crédito: David Maris
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Los restos de lo que parece ser un cuarto de baño: gabinetes, ropa, productos de aseo personal y un inodoro bajo los escombros.

Personas en trajes de baño y otros interesados con sus mascotas se acercan al cerco de la policía frente al mar para ver desde lejos las ruinas. Desde allí se entiende que la estructura no estaba tan cerca del mar como parece, y a simple vista es muy difícil detallar lo que quedó en los departamentos que aún están en pie.
Crédito: David Maris
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Una lluvia fuerte pero intermitente ha estado acompañando a las autoridades, periodistas y curiosos cerca del edificio Champlain Towers South. A veces la brisa marina levanta una espesa nube de polvo de los escombros, que a pesar de la lluvia persiste.

En la playa la policía no molesta a los curiosos. Solo llaman la atención a los osados que traspasan la cinta amarilla para tener una mejor perspectiva.
Crédito: David Maris
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“Esto es idéntico al ataque terrorista de Oklahoma”, dijo al teléfono una mujer con acento cubano desde el borde del cerco policial en la playa. “En Miami Beach hay varios edificios deteriorados y nadie hace nada” agregó en su comentario, antes de tomarse unas ‘selfies’ con las ruinas de fondo. Crédito: David Maris
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Un grueso chorro de agua se interpuso entre los curiosos y las ruinas del edificio. Por alguna razón las autoridades mantienen húmeda la zona y la lluvia que cae a ratos parece no ser suficiente para lo que necesitan. Crédito: David Maris
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Es imposible ver desde la playa el trabajo de rescate. Desde donde fueron tomadas estas fotos es muy difícil imaginar que cientos de expertos se mantienen trabajando día y noche bajo los escombros.

La magnitud de la destrucción asusta pero más expertos se van incorporando a la búsqueda de sobrevivientes. La experiencia que ha dejado tragedias similares, especialmente causadas por terremotos, mantiene a las autoridades y a los rescatistas con esperanzas.
Crédito: David Maris
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En video. “Fue un ruido de desahogo”: rescatista relata la llegada de familiares a la escena del colapso del edificio en Miami

El domingo se les permitió a los familiares de las personas desaparecidas acercarse a los escombros del edificio colapsado en Surfside, al norte de Miami Beach. Por el momento se han encontrado 10 cuerpos y más de 150 personas siguen desaparecidas.
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