Una madre hondureña vive una difícil situación luego de que este jueves su esposo fuera deportado. La mujer se quedó en Orlando junto a sus seis hijos menores de edad, tres de ellos tienen discapacidad, pero uno de ellos requiere mayor atención, por lo que pide ayuda de la comunidad para tratar de costear los gastos. “El niño necesita su espacio para las terapias y sus maestras”, dijo.