Federales no investigarán la respuesta a la pandemia en residencias de ancianos en Nueva York
El Departamento de Justicia decidió no abrir una investigación de derechos civiles sobre la respuesta a la pandemia del coronavirus en residencias de ancianos de Nueva York, específicamente relacionada con las denuncias sobre condiciones ilegales en los ancianatos públicos.
Para la investigación, iniciada el verano del año pasado por la administración Trump para los estados Nueva York, Nueva Jersey, Pensilvania y Michigan, solicitaba el número de infecciones y muertes por covid-19 en residencias de ancianos públicas.
Las autoridades federales se pregutaban si los estados, especialmente Nueva York, empeoraron el número de muertes por la pandemia al exigir a los hogares de ancianos que aceptaran a residentes que habían sido hospitalizados por coronavirus.
El gobernador Andrew Cuomo ha defendido esta decisión, diciendo que el estado estaba desesperado en ese momento para trasladar a los pacientes en recuperación fuera de los hospitales abrumados.
En una carta enviada el viernes a varios republicanos que habían exigido una investigación, el fiscal general adjunto Joe Gaeta dijo que los abogados de la división de derechos civiles habían revisado los datos enviados por Nueva York, junto con información adicional, y que habían decidido no abrir la investigación.
"Sobre la base de esa revisión, hemos decidido no abrir una investigación de la CRIPA en ningún centro público de enfermería de Nueva York en este momento", escribió Gaeta, refiriéndose a la Ley federal de Derechos Civiles de las Personas Institucionalizadas, que faculta al Departamento de Justicia para investigar las denuncias sobre las condiciones ilegales en las residencias administradas por el gobierno.
El documento no especifica el estatus de otras investigaciones sobre la forma en que el gobierno de Cuomo manejó los datos relacionados con los brotes de covid-19 en los hogares de ancianos, y que también está siendo examinado por los fiscales federales, según AP.
Más de 15,800 personas han muerto en residencias de ancianos y residencias asistidas en Nueva York. El recuento original del estado había sido mucho más bajo porque había excluido a miles de personas que se infectaron en residencias de ancianos, pero que murieron en hospitales.
AP contribuyó a la realización de este artículo.