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Pequeños momentos de la crianza que solo una mamá entenderá

Publicado 28 Dic 2015 – 12:00 PM EST | Actualizado 5 Abr 2018 – 01:47 PM EDT
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Hay algo que pasa cuando una es madre, y es que entramos en una especie de nube o nebulosa en la que no podemos ver más allá de la situación en la que estamos. Sentimos que como estamos vamos a estar siempre, y hasta a veces nos olvidamos de cómo estábamos antes.

Mi teoría, y como siempre la de mis amigas, es que ser madre de un bebé (por ahora es de lo que sabemos) está compuesto por "rachas" o momentos. Y que durante cada una de estas rachas, las buenas y las malas, una entra en una especie de amnesia temporal en la que no recuerda cómo era antes y para peor, cree que siempre va a ser así.

Las rachas pueden ser cualquier cosa: cómo está durmiendo, cuánto está comiendo, amar/odiar los viajes en auto, estar más o menos "mameros", enfermarse mucho, cualquier situación que más o menos se repita en el tiempo y tenga consecuencias puede ser una racha para una madre.

Lo loco es que cuando la racha pasa, una suele olvidarse y hasta podemos negarla cuando nos la recuerdan, no por locas, sino porque realmente no nos acordamos o tenemos solo un vago recuerdo de lo que alguna vez nos quitó el sueño como madres.

Igualmente, lo más, más loco es esta imposibilidad de ver más allá, cuando una está "adentro" de la racha cree que su vida va a ser siempre así y que no hay salida posible, ni vida diferente a lo que estamos viviendo hoy.

¿Cuál es mi racha actual? Hoy por hoy Lola está muy muy mamera, le sigo dando teta y me pide mucho más que antes. Cuando estoy en casa, no puedo ir al baño sin escuchar "mamá, mamá". Todas las mañanas cuando me voy a trabajar llorisquea un poquito, y a veces no quiere ir ni con su papá (y eso que muere por él).

Trato de pensar que es una época, que ya se le va a pasar. Y también coincide con que acabamos de volver de unas mini vacaciones y mi mamá me recordó que cuando volvimos de las otras vacaciones pasó lo mismo. ¡Yo no me acuerdo! Debe haber quedado en mi nebulosa de amnesia temporal.

Otra cosa que nos está pasando, es que Lola está muy teta-dependiente y no puedo ver más allá y pensar en cuando decida dejar de darle. Creo que la vida sin teta va a ser mucho más complicada. Me imagino yo diciéndole que no y ella llorando. Me imagino que nunca más va a dormir o que se va a desvelar a la noche cuando se despierte y yo no le de. Y me imagino que si ahora duerme mal, sin teta va a ser una pesadilla. Todo eso me imagino.

Aunque la vida ya me demostró muchas veces que no vale la pena hacerse problema por supuestos, y que hay que disfrutar el hoy. Y hoy, más allá de las complicaciones prácticas de que mi hija esté muy mamera, me gusta que se me pegue cual abrojo y que quiera dormir abrazada a mi. Después de todo, la vida pasa muy rápido y en cualquier momento va a dejar de ser un bebé.

Soy mamá de Lola de 1 año. Pienso que ser mamá es la experiencia más fuerte y movilizadora por la que puede pasar una mujer, y está bueno darnos cuenta de que no estamos solas.

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