Enseña a tus hijos a lavar su ropa y participar en esta actividad con estos 5 consejos efectivos
Enseñar a tus hijos a lavar la ropa es un proceso que vale la pena, ya que al involucrarlos en el cuidado cotidiano de la casa y de sus pertenencias enseña responsabilidad y alivia la carga de mamá y papá.
El hábito de cuidar la ropa no se adquiere en un solo día, pero conseguir que aprendan a tener su ropa lista para usar otra vez es algo bueno. Aquí hay algunos consejos para mostrar a los niños lo básico al momento de lavar su ropa.
#1 Preparen la ropa
En primer lugar, enseña a tus hijos a voltear la ropa al revés antes de lanzarla en el cesto. También es posible que desees que tus hijos adquieran el hábito de comprobar los bolsillos, para evitar que la ropa se manche de crayones o tinta, por ejemplo.
#2 Enséñales cómo clasificar la ropa sucia
A medida que lo hagas, explica que los diferentes colores y tipos de ropa son separados y lavados en diferentes temperaturas de agua o requieren productos adicionales para ayudar a limpiarlos de la mejor manera. Es probable que tengas que repetir estas instrucciones muchas veces antes de que todo empiece a tener sentido para un niño.
Siempre revisa las etiquetas: algunos artículos pueden necesitar ser limpiados en seco o lavados a mano, o tal vez lavados en una bolsa de lavandería de malla, para evitar daños.
#3 Enséñales cómo usar la lavadora
Muéstrales los diversos controles y explica cómo funcionan. Las lavadoras pueden ser complejas, pero la mayoría de la gente sólo utiliza algunas de las funciones de forma regular, por lo que puedes comenzar simplemente con un ciclo de lavado normal. Haz que el niño presione los botones y gire los comandos de la máquina. Se sentirá fortalecido por su nueva capacidad para controlar una gran máquina.
#4 Muéstrales cómo usar detergente y quitamanchas
Bajo tu supervisión, los niños pueden agregar la cantidad adecuada de detergente. Es normal que ocurra "derrames" cuando los niños aprendan a medir. Además, un buen hábito que puedes incorporar es el uso de un quitamanchas, el cual ayudará a tratar con las manchas difíciles antes del lavado.
#5 Centrifugado y secado
Ahora, cierra la tapa y deje que la tecnología haga su magia. Pero, cuando ese ciclo esté completo, recuerda a los niños que el servicio de lavandería implica unos cuantos pasos más. En primer lugar, es el tiempo de secado. Una vez más, verifica las etiquetas; algunas prendas pueden necesitar ser secadas al aire, dependiendo de su material.
Para terminar, los niños pueden ayudarte a doblar la carga de ropa recién secada. Hacerle saber a tus hijos que lavar su ropa es tan importante como hacer la tarea, además aumentará la probabilidad de que los buenos hábitos se queden con ellos hasta la edad adulta.
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