Nolan defiende su elección de Harry Styles para Dunkirk y la compara con la de Heath Ledger
Sus películas de gran inventiva visual, complejidad narrativa y de temáticas casi siempre serias y pretendidamente profundas, y su versión de Batman en la exitosa trilogía The Dark Knight, convirtieron a Christopher Nolan en uno de los pocos directores hollywoodenses que tiene el privilegio de combinar el prestigio artístico con una enorme popularidad.
Pero estas dos cosas se han combinado también para crear una suerte de fandom que, al menos en parte, se ve a sí mismo como demasiado sofisticado y refinado para rebajarse a la experiencia de tener que ver en la película de su director favorito a un ex One Direction, otrora representante del indigno fenómeno de las boy bands específicamente diseñadas para despertar la histeria adolescente con afinados hits de pop comercial.
Tras alejarse de One Direction y comenzar su carrera como solista, Harry Styles tendrá también su debut como actor en Dunkirk, lo que ha despertado diversas críticas y cuestionamientos.
Así que su director tuvo que salir a defender su decisión de elegir a Harry Styles para un rol protagónico, en una película cuyo elenco también incluye a figuras como Kenneth Branagh, Mark Rylance, James D’Arcy, Cillian Murphy, Fionn Whitehead y Tom Hardy.
Algunas críticas sugirieron que Christopher Nolan estaba buscando algo así como un impacto publicitario con la elección, algo inusual, de un actor debutante como Harry Styles, muy famoso aunque en otra disciplina.
Nolan negó esto, diciendo que en realidad no tenía mucha idea quién era.
«Era alguien nuevo para mí. Quiero decir, mis hijos alguna vez lo habían nombrado, pero yo no estaba realmente familiarizado con él».
Harry Styles obtuvo su papel tras una audición en la que compitió con un centenar de candidatos para interpretar este personaje.
El director aseguró que lo decisivo fue su talento, y no otra cosa: «Lo que vi cuando hizo su audición fue a un joven muy carismático que le imprimió una evidente honestidad y sutileza a su interpretación».
Para justificar su decisión y echar por tierra las críticas de manera definitiva, apeló al personaje más icónico de su filmografía y a la que es considerada una de las actuaciones más emblemáticas en un blockbuster hollywoodense.
«Cuando elegí a Heath Ledger para interpretar al Joker en The Dark Knight también hubo muchas críticas y se generaron muchos comentarios. Pero yo tengo que confiar en mis instintos, y Harry es perfecto para este papel».
El papel de Harry Styles, sin embargo, no es uno en el que el actor se luzca por su espectacularidad o expresividad, sino todo lo contrario; sus virtudes podrían pasar desapercibidas.
«Realmente espero que cuando la gente vea la película pueda apreciar lo que ha hecho» agregó Nolan, «porque es una actuación muy sutil, muy honesta y realista. No quise que hiciera algo demasiado vistoso, pero lo que es importante es lo que dice, me parece, sobre la naturaleza humana y cómo actúa una persona en diferentes situaciones. Creo que Harry ha logrado esto con una gracia y un realismo increíbles. Y, como director, eso es lo que buscas».
Dunkirk, que gira en torno a un famoso evento sobre el comienzo de la Segunda Guerra Mundial, cuando miles de soldados aliados fueron evacuados exitosamente (milagrosamente, diría después Winston Churchill) de las tropas nazis que los tenían rodeados, será narrada desde tres perspectivas diferentes —tierra, aire y mar—.
Nolan decidió contar esta historia por ser en cierto modo anti-hollywoodense, ya que no se trata de una victoria militar (sino una huida exitosa) y no involucra el ejército estadounidense.