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Libros

Arte retro: tatuajes vintage de máquinas de escribir

Publicado 20 Jun 2015 – 05:00 PM EDT | Actualizado 14 Mar 2018 – 09:48 AM EDT
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Como todo lo vintage, la máquina de escribir es un elemento que parece resucitar entre esos círculos intelectuales para los que este mítico artilugio nunca debió ser sustituido por los procesadores de texto.

Una versión temprana de la máquina de escribir fue patentada en 1714 por Henry Mill. Pero a lo largo del siglo XIX otros inventores mejoraron el prototipo, y fue Christopher Sholes quien instauró en el mercado la primera máquina de escribir en 1872. Este artefacto se convertiría en el aliado de oficinistas, burócratas y, como todos sabrán, escritores que nunca renunciaron al arte de escribir en esta máquina, junto a la que solía reposar un cenicero con un cigarro consumido.

Olivetti y Olympia fueron las dos grandes empresas que dominaron el rubro con sus máquinas de escribir hasta el auge de los procesadores de texto en los años 80. La innovación marginó a sus predecesoras poco a poco, hasta una extinción definitiva propiciada por el cierre de la última fábrica en 2011. 

Este autor, como escritor, reivindica este invento mediante estos tatuajes vintage de máquinas de escribir, y clama por el regreso de tan nostálgicos aliados que, esperemos, vuelvan a formar parte de los hogares más allá del mero motivo decorativo tan propiciado en ciertos lugares. 

Estos tatuajes de máquinas de escribir nos transportan a los siglos XIX y XX, donde este artilugio era imprescindible. El eco de sus teclas resuena aún en nuestros oídos (y en los de nuestros padres y abuelos), y rememora parte de una sociedad que poco sabía de esos futuros adelantos tecnológicos que explotaron al iniciarse el nuevo milenio.

Y hablando de nostalgia, ¿habías visto estos  tatuajes de cassettes?

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