Las embarcaciones partieron este viernes de Bayside Marina. El viaje está dentro de la legalidad siempre y cuando no penetren en aguas territoriales cubanas. Los viajeros pretenden permanecer en aguas internacionales, aproximadamente a unas 15 millas náuticas frente a La Habana, y una vez allí apagarán los motores y quedarán a la deriva, pero deberán corregir su posición cada 15 minutos.