Liliana Carrillo admite que asesinó a sus tres hijos en Reseda y confiesa cómo cometió el crimen
LOS ÁNGELES, California. - Liliana Carrillo, la única sospechosa del asesinato de sus tres hijos, admitió a un medio local en una entrevista desde la cárcel en el condado de Kern, que ahogó a sus hijos y que lo hizo para protegerlos de su padre, Erik Denton..
Carrillo aseguró que mató a sus hijos, Joanna Denton Carrillo, de 3 años, Terry, de 2, y Sierra, de solo 6 meses y 23 días de nacida, para salvaguardarlos de su padre, quien, según Carrillo, está involucrado en tráfico de personas.
“Los ahogué. Lo hice suavemente. No sé cómo explicarlo. Los abracé. Los besé. Estaba pidiendo perdón todo el tiempo. Yo amaba a mis hijos”, dijo Lilliana Carrillo a la estación de televisión de Bakersfield KGET. La sospechosa aseguró que deseaba que sus hijos todavía estuvieran vivos, y agregó: "Prefiero que no sean torturados y abusados de manera regular por el resto de sus vidas".
La mujer, de acuerdo con el padre de sus hijos, Erik Denton, no estaba estable mentalmente y estaba envuelto en una disputa legal para obtener la custodia de los menores.
Horas antes de que tres niños, menores de tres años, fueran hallados muertos en un apartamento de Reseda, Carrillo envió un manifiesto a un juez con información sobre su situación.
El documento, que fue obtenido por noticias Univision 34 Los Ángeles, fue enviado por la sospechosa a las 4:15 de la madrugada el pasado sábado 10 de abril.
En el manifiesto de 120 páginas, Carrillo se disculpó con su mamá y su familia y aseguró que, "estoy haciendo esto porque nadie me cree, es verdad, está pasando y no tengo a donde ir”.
Javier Carrillo, hermano de Liliana, dijo este lunes que “estábamos pidiendo ayuda y no nos la dieron, el sistema le a falló mi hermana". La madre de los tres niños, que ahora está en custodia de la policía de Tulare, incluyó también documentos médicos que datan del 2017 de sus niños y de ella, admite que sufría de depresión posparto. Además, incluyó cartas que detallan que contactó en repetidas ocasiones el Departamento de Servicios a Niños y Familias (DCFS) en Porterville y en Los Ángeles.
Concluyen las autopisias
Las autopsias de los tres hijos de Liliana Carrillo ya concluyeron, dijeron a Univision 34 Los Ángeles fuentes en la oficina del Médico Forense del condado de Los Ángeles. Lo que se puede revelar hasta el momento es que la muerte de los pequeños fue violenta y fueron hallados por la abuela sobre una cama.
Los cadáveres de los menores fueron entregados este jueves al padre Erik Denton. Los menores fueron hallados sin vida dentro de un apartamento en Reseda el pasado sábado 10 de abril.
Su madre, Liliana Carrillo, es la única sospechosa del asesinato de los menores y en diversas ocasiones tanto ella, como su ex pareja Erik Denton, contactaron a las autoridades para pedir ayuda.
Juana Aguilera, portavoz del Departamento de Servicios para Familias y Niños, DCFS dijo a Univision 34 Los Ángeles que “no tenemos comentario en este momento, pero lo que puedo decir es que el depto trabaja con las familias para poder prevenir casos como este”.
La familia de Liliana Carrillo no opina lo mismo y han dicho en repetidas ocasiones que todas las agencias que debieron ayudar a Liliana no lo hicieron.
“Nosotros pedimos mucha ayuda, como la familia de Erik (pidió ayuda), y nadie nos correspondió”, dijo Ana Carrillo, hermana de Liliana Carrillo.
La situación que vivó esta familia es similar a otros casos reportados por Univision 34 Los Ángeles de muertes de niños que se pudieron evitar como la Gabriel Fernández, Anthony Ávalos, Victoria Sandoval y Noah Cuatro, entre otros. Todos estos menores tienen en común que perecieron en circunstancias de torturaa, abandono y negligencia.
Hace menos de dos años, en una investigación que nos tomó 6 meses realizar, revelamos el complicado sistema de burocracia que existe en el Departamento de Servicios para Familias y Niños del condado de Los Ángeles. En ese momento el juez Michael Nash dijo que “hicimos ciertas recomendaciones para mejorar el sistema que usan para tomar decisiones y cambiar las prácticas que incluyen entrenamiento”.
En ese momento, noticias Univision 34 habló con Bobby Cagle, director actual de la agencia, cuestionamos a Philipp Browning el director anterior sobre las fallas en el sistema, y documentamos los errores y las omisiones de los expedientes que terminan en la muerte de niños y luego enterrados bajo el velo de confidencialidad de la agencia DCFS, para proteger las identidades de los niños fallecidos, a quienes no supieron cómo proteger cuando estaban vivos.
Un trágico hecho
Liliana Carrillo, de 30 años, está presa como única sospechosa en la muerte de sus tres hijos en el vecindario Reseda, del valle de San Fernando, informó la Policía de Los Ángeles (LAPD).
Los tres niños fueron encontrados muertos en la cuadra 8000 de Reseda Boulevard, cerca de Strathern Street, alrededor de las 9:30 am del sábado 10 de abril, según la oficial Rosario Cervantes de la Sección de Relaciones con los Medios del Departamento de Policía de Los Ángeles.
Los socorristas del Departamento de Bomberos de Los Ángeles que atendieron la emergencia declararon muertos a los tres pequeños en la escena y dijeron que "todos los niños parecen tener menos de 5 años".
Horas después de que se informara del hallazgo de las pequeñas víctimas, las autoridades anunciaron el arresto de Carrillo alrededor de las 2:30 pm del mismo sábado. La hispana fue detenida en Ponderosa, una ciudad del condado de Tulare, en el centro de California.
De acuerdo con el LAPD, al parecer la sospechosa tiene conexión con "un robo de auto en el área de Bakersfield". Cualquier persona con información sobre este caso debe llamar al 213-486-6890 o enviar un correo electrónico a rhdtipline@lapd.online.