Graciela Zavala, de la fundación Haciendas del Mundo Maya, explica que hubo una confusión porque la información indicaba que las carteras se vendieron por más de 1,500 dólares y que las artesanas solo recibieron 13 dólares. Asegura que ellas no elaboraron las carteras, solo una aplicación decorativa, y la marca pagó por esa colaboración. Zavala indicó que las artesanas no fueron explotadas.