Carlos Díaz Rosillo, director de políticas públicas de la Casa Blanca, dice que la clase media estadounidense se verá beneficiada tras la reducción de impuestos, y pasarán de recibir subsidios de 1,000 a 2,000 dólares por cada hijo. Además, existe la esperanza de que los sueldos de los trabajadores suban debido a que las empresas podrán invertir en el trabajador americano.