El comunicador del Diario de Acayucan formaba parte de un programa gubernamental de protección desde el 2012, después de recibir amenazas por denunciar corrupción y desvío de recursos públicos. Ríos Vázquez se dedicó a conducir tráiler hasta que fue testigo de abusos contra comunidades indígenas y campesinas, hechos que lo convirtieron en reportero.