El burro es un animal domesticado desde la Antigüedad, especialmente en el corazón de África y Eurasia, zonas en las que encontramos algunas de las mayores cantidades de ejemplares de esta especie equina. Este animal ha sido considerado como símbolo de mal augurio por los egipcios y condenado, a lo largo de la historia, a convertirse en un animal de carga, especialmente en China, país que acumula el mayor número de burros del mundo.