Cuatro cosas que debió saber Justin Bieber antes de visitar Tulum
Por: Marco A. Hernández
La noticia circuló hace unos días por todo el mundo: Justin Bieber fue “invitado” a salir del sitio arqueológico de Tulum, después de haber sido reconvenido por su comportamiento en varias ocasiones.
En las redes sociales circula un video en que se ve al cantante abandonando el lugar sonriente y sereno; tuvo suerte, pues en el transcurso de su visita infringió varios reglamentos.
- En México está prohibido beber en la vía pública
Aunque no se trata de una ley nacional y cada municipio (ciudad) puede definir sus propios criterios al respecto, la práctica común es que en México esté prohibido ingerir bebidas alcohólicas en la vía pública. Es el caso de Tulum, donde el apartado II del artículo 25 de su Reglamento de Justicia Pública establece que esa práctica es una falta administrativa al orden público.
Al bajar de una camioneta con una cerveza en la mano Justin se expuso a un arresto de 24 a 36 horas, que podría haber evitado pagando una multa de entre $40 y $125 dólares (la cifra no depende de la cantidad de alcohol ingerido sino de los problemas ocasionados).
- Un sitio arqueológico es un monumento público, no un parque de diversiones privado
Las crónicas del acontecimiento señalan que Bieber ofreció en la taquilla pagar lo necesario para desalojar a todos los visitantes que se encontraban ahí y tener una fiesta particular; es muy probable que no imagine lo afortunado que era (él, y todos los visitantes) por poder entrar.
En los últimos años, y siguiendo las recomendaciones de los organismos internacionales, el Instituto Nacional de Antropología e Historia ha definido lineamientos cada vez más rigurosos para permitir la apertura de zonas arqueológicas a la visita pública; por supuesto, esos criterios impiden la renta del lugar para eventos privados.
- En México no está permitido el nudismo (¿o sí?)
Al parecer, durante su recorrido por la primera plataforma de Tulum, Bieber decidió que era buena idea bajarse la ropa interior, ocurrencia que le valió una amonestación.
En México hay muchas actividades que enfrentan un estatuto legal ambigüo y el nudismo es una de ellas; aunque algunos hoteles lo toleran (cuando sus playas son de acceso difícil), lo común es que desnudarse en una playa pública, y más en un sitio arqueológico, sea considerado por las autoridades del lugar como una falta al orden público.
La excepción puede ser la playa de Zipolite, en el estado de Oaxaca, donde, por cierto, se realizará el Encuentro Latinoamericano de Nudismo, del 28 al 30 de eneron de este año, con la intención de que los hoteleros, la comunidad y las autoridades del lugar terminen por ofrecer las garantías necesarias para la práctica de la vida nudista en ese destino.
- El principal objetivo de un sitio arqueológico es preservar el patrimonio
El incidente final que llevó a los responsables de la zona arqueológica a pedirle a Bieber que se retirara fue su intento por subir a una plataforma que está cerrada al público por su vulnerabilidad.
Todos los organismos internacionales que trabajan sobre el patrimonio arqueológico de la humanidad coinciden en dar prioridad a su preservación sobre su utilización como atractivo turístico. En función de eso, y también para evitar la devastación asociada con la expansión de las zonas urbanas, el congreso mexicano aprobó en 2014 una modificación a la Ley Federal sobre Monumentos Arqueológicos, Artísticos e Históricos que endureció las penas para quienes causen daños a los sitios históricos del país.
De haber insistido en su empeño, Justin podría haber enfrentado una condena de entre 3 y 10 años de prisión y haber sido obligado a pagar una multa por hasta el valor total del daño que hubiera causado a la construcción.
¿Tienes planes de visitar Tulum? Mejor no confíes en que correrás con la misma suerte de Justin Bieber.