8 ideas de bonsái para inspirarse
Los bonsáis son uno de los legados más bellos que nos ha compartido la cultura oriental y es el fruto de un trabajo de dedicación y amor, pues consiste en el arte de cultivarlos pero reduciendo su tamaño mediante diferentes técnicas.
No todos los bonsáis son iguales, de hecho existen por lo menos 8 tipos que vamos a compartir contigo para que aprendas a diferenciarlos y sorprendas a todos con tus conocimientos en la materia.
Estilo Chokkan (Choku=derecho, Kan=tronco)
Se reconocen fácilmente por ser tener un tronco vertical, sin presentar ninguna curva, el primer tercio del mismo no presenta ramas y a partir allí, el árbol forma un triángulo escaleno.
Simboliza la fuerza y el desafío constante a las fuerzas de la naturaleza.
Estilo Moyogi (Moyo=dibujo, Gi=árbol)
Es el bonsái más conocido y popular de todos los de su especie, ya que permite desbordar la creatividad del artista. También se le llama vertical informal, su tronco tiene una serie de curvas cada vez menos pronunciadas a medida que el árbol sube.
Las ramas están repartidas a lo largo de todo el tronco lo que le da una apariencia muy natural.
Estilo Hokidachi (Hoki=Escoba, Dachi=Tenerse en pie)
Ideal para los árboles frondosos de hoja caduca con ramas finas, es el que más se asemeja a un árbol de tamaño normal, recibe su nombre del parecido que tiene con una escoba vieja invertida, pues el tronco es recto y las ramas, en forma de bola.
Exige cierta pericia para su cuidado, pues las ramas deben de ser cortadas de forma simétrica para darle esa silueta tan característica.
Estilo Kengai (Ken=enganchar, Gai=acantilado)
Es un estilo hermoso inspirado en los árboles que crecen prendidos a un acantilado, por lo que se ven recaer bajo de la maceta, creciendo hacia abajo. Esta característica lo hace uno de los más complicados de conseguir y cuidar.
Conocidos también como cascada, necesitan para conservar el equilibrio que sus ramas crezcan horizontalmente, y la maceta debe ser más profunda.
Estilo Ah-Kengai
Es una variante del Kengai, sin que el tronco caiga por debajo de la maceta, no obstante, tiene una inclinación profunda, lo que le da una curva pronunciada y recuerda igualmente a los árboles que crecen en condiciones poco naturales.
Se les llama también semicascadas y requieren de gran experiencia para que su forma se vea natural y no sufran ni las raíces ni las ramas.
Estilo Bunjingi (Bunjin=escritor, Gi=árbol)
O literati son los árboles sobrevivientes a las condiciones adversas de mucha competencia, donde la única opción es crecer por encima de los demás; presenta un largo tronco desnudo y fino, con algunas curvas y solo en la punta las ramas.
Para este tipo de bonsái se sugiere usar macetas redondas y ensanchadas.
Estilo Fukinagashi (Fuki=soplar, Nagahi=flotar)
Es el bonsái que evoca a los árboles que viven en zonas donde los vientos son intensos, lo que los hace inclinarse hacia donde el viento sopla más fuerte y también logra que sus ramas crezcan en el mismo sentido.
Obviamente para darle una forma realista es necesario cortar las ramas que crecen en el lado opuesto, los bonsáis que carezcan de equilibrio o con ausencia de ramas se prestan perfectamente para realizar este estilo.
Estilo Shakan (Sha=oblicuo, Kan=tronco)
Contrario al estilo Chokkan, este árbol presenta una inclinación pronunciada con un máximo de 45 grados. La primera rama crece en dirección contraria a la inclinación del árbol para mantener el equilibrio, mientras que las raíces en esta dirección son más fuertes para sostener el árbol.
¿Cuál es tu estilo de bonsái favorito? Cuéntanos tu opinión.