Como el cántico infantil que dice que a alguien se le romperá la espalda, nunca pises una grieta en la calle, porque algo malo te va a pasar. Una vieja creencia asegura que una grieta así señala el límite entre el mundo conocido y el metafísico desconocido, así que puedes invitar a "fuerzas sobrenaturales" a invadirte. Crédito: Shutterstock