Gabriel García Márquez y su amor por el cine: una faceta casi desconocida
Uno de los hombres más influyentes de la literatura latinoamericana fue Gabriel García Márquez, quien nació un 6 de marzo de 1927 en Aracataca, Colombia. Autor de las novelas más reconocidas mundialmente, no hay dudas de que fue una fuente de inspiración para muchos artistas.
Un escritor multifacético que no solo se dedicó a la literatura, si no también al cine: estudió, escribió y dio clases de cine, y a su vez fue guionista. Quizás muchos conocen su literatura, pero pocos saben de su amor por el cine, y esa es su faceta que queremos recordar.
Muchos críticos dijeron que las adaptaciones al cine de sus obras no colmaron las expectativas del público ni las de su autor, quien muchas veces comentaba su decepción. Probablemente los lectores sintieron esas pérdidas porque se posicionaron desde la literatura y no desde el cine: son distintos lenguajes y por eso una película jamás será fiel al libro. O quizás en muchos casos los guionistas pretendieron ser fieles al libro, olvidando el lenguaje cinematográfico, algo que se nota en el resultado.
Lo que sucede es que no hay pérdidas, se cuenta otra historia a partir de una historia. Por eso no importa que él haya participado del proceso creativo de los guiones, el resultado iba a ser distinto a lo narrado en el libro.
Para no tener decepciones a la hora de mirar una película adaptada lo ideal sería concebirla como una obra nueva, olvidándonos lo que nos hizo sentir la obra literaria (dejando atrás todo tipo expectativas).
Es uno de los escritores con más novelas adaptadas a la pantalla grande. Estas fueron algunas de las adaptaciones al cine que se hicieron de sus obras.
El amor en los tiempos del cólera (Mike Newell, 2007)
El coronel no tiene quien le escriba (Arturo Ripstein, 1999)
Crónica de una muerte anunciada (Francesco Rosi, 1987)
Memoria de mis putas tristes (Henning Carlsen, 2011)
Muchos de sus personajes viven periodos de violencia y las más variadas injusticias sociales, y a través de ellos recordamos que gracias a la literatura se pueden modificar realidades preocupantes. Ya sea en el cine o la literatura su obra ha inspirado a miles, ha dejado una marca en la sensibilidad y en la imaginación de muchos. Un legado muy valioso.