Tras años de prohibición China quita su gran muralla a las consolas extranjeras

China es en cuanto a videojuegos un país principalmente conocido por dos cosas: las imitaciones de baja calidad, y las inevitables prohibiciones constantes... Aunque ahora también, por la calidad de sus jugadores en cuanto a eSports se refiere. Un país donde por cultura y política los productos occidentales tienen muy difícil su llegada, y donde el público queda de rehén.

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Uno de los mayores problemas que sufrían los aficionados a los videojuegos en aquel país, era la imposición del gobierno de utilizar solamente consolas manufacturadas en la propia China, lo que impedía la importación de productos extranjeros. Como leve mejora, en 2014 se permitió adquirir estos productos dentro de una zona franca de Shanghai, y no es sino hasta ahora que Nintendo, Sony y Microsoft pueden ofertar libremente sus consolas en el gigante asiático.

Y es que sí, aunque no lo creas, en China era imposible disfrutar de un Xbox o las últimas PlayStation, algo que por suerte para todos se termina ya mismo. Gracias a esto, el mercado gamer se había inclinado lógicamente a las PC y dispositivos móviles... ¿Estarán a tiempo de revertir la situación?