Este era el secreto de Audrey Hepburn para mantener su figura
A casi 25 años de la muerte de Audrey Hepburn, su hijo Luca Dotti reveló la dieta de su madre en un nuevo libro titulado «Audrey at Home, Memories of My Mother's Kitchen».
Dotti detalla la infancia de Hepburn durante la ocupación Nazi en los Países Bajos y su glamourosa carrera en Hollywood. El libro documenta lo que comía y una selección de sus recetas favoritas.
El desayuno era importante para la actriz. "Mamá, como cualquier doctor sabio. creía en las virtudes de un buen desayuno, nunca se lo saltaba, ni siquiera en su día de 'detox' mensual, cuando solo comía yogurt y manzana rayada", dijo Dotti en entrevista con la revista PEOPLE.
En un día normal a Hepburn le encantaba comer las calorías. "Las personas pensaban que porque era muy flaca tenía un desorden alimenticio, pero no es cierto. Le encantaba la comida italiana y la pasta. Comía muchos cereales, no mucha carne, un poco de todo", dijo Dotti.
Hepburn pesó 49 kilogramos toda su vida adulta. La casa de subastas Christie's ordenó maniquies con una cintura de 55 centímetros para subastar algunas de sus piezas más icónicas.
Su comida favorita eran papas horneadas y salmón ahumado. También le encantaban los dulces y todas las noches disfrutaba de chocolate.
Robert Walders, quien fue pareja de Hepburn desde 1980 hasta 1993, asegura que la actriz no hacia dietas pero que le gustaba el ejercicio, el chocolate y el whiskey.
«Caminábamos por millas, ella se me adelantaba», dijo a la revista, «tenía un sano metabolismo pero nunca se excedía. Nunca dijo: 'Tengo que hacer 5 millas hoy'. No hacía dieta. Desayunábamos pan integral con mermelada, la comida era pollo o ternera o pasta, casi siempre con vegetales del jardín, y para la cena casi siempre era sopa con pollo y vegetales. Ella comía chocolate después de la cena y un trago de whiskey».
En el libro, Dotti también explica cómo la ocupación Nazi afectó la relación de Hepburn con la comida. La actriz fue una de las cuatro millones de personas que casi se mueren de hambre por culpa de los ocupadores nazis. Sufrió de ictericia y anemia como resultado de eso.
«Al final de la guerra estaba muy cerca de la muerte. Comiendo ortigas, bulbos de tulipán y tomando agua llenaba su estómago», escribió Dotti. «Mi madre cargó la guerra consigo por toda su vida».
«Tenía la misma edad que Anna Frank y una vez dijo: 'Esa es la chica que no logró vivir y yo sí lo hice' Su voz se cortaba y sus ojos se llenaban de lágrimas».
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