7 útiles usos para el desodorante, más allá de la axila

A veces vivimos tan consumidos en una era tecnológica agitada que dejamos ciertos artículos encerrados en una única función sin darle la más mínima consideración a su potencial, más allá del propósito con el que se nos presenta. Cuántas cosas usamos a diario de una forma monótona, en piloto automático, sin pensarlo. Y resulta que cuando tenemos algún inconveniente ese mismo producto al que no le das más de un uso, resulta tremendamente útil.

Por suerte en el mundo hay personas con una capacidad creativa fuera de los parámetros comunes, que consiguen explotar productivamente el potencial de las cosas que parecían tener un único uso. Un ejemplo es el desodorante. Es poco probable que nadie le haya puesto más cabeza a este artículo de higiene.

El desodorante sirve para controlar los niveles de sudoración en las axilas, y evitar olores fuertes, que nuestro cuerpo comienza a producir una vez nos desarrollamos, para anunciar que estamos listos para reproducirnos. Después de todo somos animales con una cadena evolutiva, y como toda especie viva nuestro principal objetivo es la prevalencia.

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Hay muchos tipos de desodorantes, eso sí. Con diferentes olores, unos vienen en spray, otros en barra, o en roll-on, los hay en gel, para piel sensible, para evitar manchas. No falta creatividad a la hora de presentar este producto para hacerlo más atractivo a la venta. Pero además el desodorante tiene unas características que le dan un potencial más allá de controlar el sudor y olor de nuestras axilas.

En este post vamos a mencionar algunas de los usos útiles que le puedes dar al desodorante, más allá de la axila, tal vez te sorprendas.

#1 Para un mejor maquillaje

Hay personas que tienen la piel grasa, y aunque no tenga nada de malo y existan un sin fin de productos para tratar mejor este tipo de piel, a veces nos vemos en apuros. A veces tienes un evento, estás por maquillarte, pero te das cuenta que se te acabó el tapaporos.

Esto significa que cuando te maquilles van a haber zonas que se verán brillantes. No temas, porque si tienes un desodorante al alcance estás salvada. La función fundamental del desodorante es obstruir los poros, por eso debemos aplicar poca cantidad en nuestras axilas.

Esa cualidad lo hace perfecto sustituto del tapaporos que usas antes de aplicar el maquillaje. Con untar una fina capa en tu rostro antes de maquillarte bastará.

#2 Removedor de esmalte

Confieso que este fue uno de los puntos que más me sorprendió. A veces pasa que una no está tan pendiente de tener quita esmalte a la mano. A veces se termina y se nos olvida comprar nuevo.

Esto es terrible cuando te invitan a última hora a una salida con amigos y tus uñas son un desastre. Porque no se ve nada lindo cuando la pintura de uñas está desgastada o roída.

Pues resulta que el desodorante te puede ayudar con este dilema. Lo que tienes que hacer es sumergir tu mano en agua jabonosa tibia por un par de minutos, rocía una mota de algodón con desodorante en spray y remueve el esmalte.

#3 Contra las picadas

Uno de los consensos a los que podemos llegar como seres humanos es que los insectos son un fastidio. Claro las abejas nos dan miel, y hay algún que otro que es hasta lindo, pero en general los bichos son eso, bicho.

Lo peor es que muchos nos pican, transmitiendo enfermedades, y aún si no nos infectan ese picor es muy molesto, se puede hasta inflamar. Pues para eso también sirve el desodorante.

Si te pica un mosquito, o cualquier otro bicho, aplica una capa de desodorante para aliviar.

#4 Lo lentes en su sitio

A veces, cuando hace mucho calor, tus lentes comienzan a deslizarse por tu nariz. Es un fastidio porque tienes que estar constantemente devolviéndolos a su sitio. Esto ocurre porque los poros en tu rostro también sudan.

Y ya establecimos que la función del desodorante es obstruir los poros para evitar que el sudor fluya libremente. Así que si aplicas un poco de desodorante en la base de tu nariz, donde van los lentes, o gafas, verás cómo se quedan en su sitio.

Procura usar de barra en este caso, no sea que el spray caiga accidentalmente en tus ojos y provoque irritación.

#5 Otras partes sudorosas

La realidad es que la piel que cubre nuestro cuerpo está plagada de poros. Esto es necesario, por supuesto. Sudar no es necesariamente algo negativo, al contrario, de hecho. Pero hay ocasiones en las que no es agradable, al menos no en algunas zonas.

Como las manos, por ejemplo, o los pies. Hay personas que tienden a sudar más que otras, que sufren porque sus manos sudan constantemente. Hay mujeres que sufren porque la base de sus senos puede verse afectada también.

Para todas esas otras zonas del cuerpo que te afectan por su tendencia a sudar: Desodorante. El mismo trabajo que hace en la axila, lo puede cumplir en tus manos o pies o pecho. Que tal las que tenemos los muslos rellenitos y andar en falda puede ser doloroso por el contante roce y el calor: Desodorante.

#6 Ambientador

Que levante la mano conmigo el que este harto de los ambientadores con olor a pino. Por suerte ahora el mercado tiene una mayor variedad de productos para mejorar el aroma de casi todos los lugares. Los hay de todos los olores, tamaños y formas.

Pero algunos, con eso de que tienen una función tan específica, pueden ser un desperdicio de dinero. Para que comprar un ambientador cuando puedes usar un desodorante. Lo único que tienes que hacer es destaparlo y colocarlo cerca de la salida de aire. Aquí es mejor usar el de barra.

También puedes colocarlo abierto en alguna gaveta y darle a tu ropa un ramo refrescante.

#7 De acné y otras dolencias

Ya se sabe que tocar el acné es la peor decisión que alguien puede tomar en su vida. A veces puede parecer irresistible la tentación de explotar esas desagradables protuberancias, pero al hacerlo sólo empeoramos la condición.

El acné puede parecer una acumulación exclusiva de grasas, pero las bacterias y el sucio tienen mayor presencia. Lo que puedes hacer, cuando tienes una de esas pepitas que parece fueran a reventar en cualquier momento, es secarlas con desodorante.

Los complementos de este producto lo hacen perfecto para mantener el acné seco. ¿Cuáles otras dolencias? Te preguntarás. Bueno a todos nos ha pasado que tenemos un par de zapatos que son hermosos, pero que nos hacen daño. Sólo tienes que aplicar un poco de desodorante en la zona afectada para aliviar la irritación y evitar mayor daño.

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Vean como eso de encasillar las cosas es contraproducente hasta en lo más mundano. Hay que tener la mente abierta y ser más receptivo, por lo general vamos a llevarnos sorpresas agradables y, a veces, hasta nos pueden sacar de apuros. Por cierto, si no se han enterado, yo recientemente descubrí que aplicar el desodorante en las noches, antes de dormir, tiene mejor efecto.