Las inundaciones causadas por las tormentas tropicales o huracanes suelen dejar atrás un enorme inventario de
autos con daños por agua. Naturalmente los dueños de
estos vehículos, particulares y concesionarios, van a querer venderlos cuanto antes a fin de minimizar sus pérdidas. Estos son autos que por efecto de los daños sufridos durante la inundación estarán, durante la vida útil que les quede, plagados de desperfectos que pueden poner el riesgo la seguridad de sus usuarios y que afectará el bolsillo de sus dueños con constantes reparaciones y por la perdida de valor del vehículo. Crédito: Getty Images
En territorios insulares como
Puerto Rico y
Hawaii, donde el costo de transporte de los vehículos desde tierra firme encarece notoriamnete el precio de los automóviles, el problema es aún mayor ya que el bajo costo de estos autos los hacen muy atractivos para gran cantidad de la población, ya que los carros dañados por el agua pueden lucir como automóviles normales después de una meticulosa limpieza. Crédito: Shutterstock
Es por lo anterior que antes de comprar un vehículo usado, lo más recomendable es hacer que
un experto lo inspeccione. Su experiencia y equipamiento lo capacitan para inspeccionar partes del vehículo que tu no sabrás ver ni juzgar. Pero, ¿qué podemos hacer cuando no tenemos un mecánico experto al cual acudir? Crédito: Shutterstock
Verifica que el auto no tenga un titulo de propiedad marcado como “inundado”. Leyes estatales exigen que los títulos de propiedad de autos que han sufrido daños por inundación y han sido reparados por las compañías de seguros, sean marcados como inundados o
flooded. Hay estados como Texas donde incluso los títulos tienen que distinguir si la inundación fue causada por agua dulce y agua salada, ya que esta última implica un
riesgo de corrosión mucho mayor. Crédito: Shutterstock
Es importante pedirle al vendedor que deje examinar el titulo de propiedad del vehículo. La
Oficina Nacional de Crímenes de Seguros (NCIB por sus siglas en inglés) tiene un
recurso en línea para constatar si el vehículo fue alguna vez considerado severamente dañado utilizando su número de identificación o VIN. Sin embargo la verificación del título de propiedad no debe ser el único criterio ya que hay estados en los que no se requiere marcar el título de propiedad del vehículo, por lo que un auto inundado con un titulo de propiedad emitido en alguno de esos estados, puede tener un titulo regular. Crédito: Shutterstock
Prueba el sistema eléctrico: Enciende los sistemas eléctricos más obvios, como las luces externas e internas, fijas e intermitentes, la bocina, el sistema de sonido, los limpiaparabrisas, el aire acondicionado. Luces que luzcan débiles y titilantes, una bocina débil y un sistema de sonido defectuoso son signos de un con problemas eléctricos. También enciende el vehículo, asegúrate de que todas las luces del cuadro de instrumentos funcionen correctamente. Crédito: Shutterstock
Confía en tu olfato. Cualquier automóvil cuyo interior muestre el distintivo olor a moho merece ser inspeccionado al máximo. Este olor es un signo distintivo de un auto inundado, pero no todos los autos que lo muestren necesariamente han sido víctimas de una inundación. Crédito: Shutterstock
Confía en tu tacto. El daño por inundación siempre es extenso y aunque no necesariamente es detectable a simple vista una buena manoseada puede descubrir indicios que el vendedor dejó de maquillar. Pasa la mano por los asientos apretando los colchones para sentir cualquier indicio de agua. Crédito: Shutterstock
Confía en tu vista: Busca signos de óxido y corrosión. La corrosión es uno de los males que va a afligir a un auto inundado mucho después de haber pasado el incidente. Busca indicios de óxido alrededor de los tornillos, bisagras, juntas, cerraduras e incluso dentro del vehículo como los mecanismos debajo metálicos debajo de los asientos. Busca indicios de óxido en partes altas del auto a las que nunca debería llegar el agua. Crédito: Shutterstock
Busca suciedades: Una inundación llevará basura a lugares de un vehículo donde la suciedad nunca llegaría por si misma. Grama seca, tierra y arena el lugares como el maletero, alrededor del motor o en las alfombras son signos distintivos de que el auto fue inundado. Crédito: Shutterstock
Revisa el aceite del motor: El aceite del motor que suele ser transparente, se verá opaco cuando le haya entrado agua al motor de un vehículo. El aceite perderá viscosidad y se volverá pegajoso, lo cual no sólo en un signo de que le entró agua al motor sino también hará poco o nada por proteger los componentes internos del mismo lo cual es la única misión del aceite del motor. Crédito: Shutterstock